Entre los rockeros más prolíferos en la composición podemos contar a Ty Segall, quien publica música a diestra y siniestra con proyectos muy diversos, hoy lanza su octavo álbum como solista y es una locura.
El californianio Ty Segall ha dado nueva vida al garage rock con su repertorio, llevándolo de un extremo a otro de sus posibilidades, sin perder la dosis psicodélica que define su estilo. En «Emotional Mugger«, el excéntrico productor cambia nuevamente la dirección de su música y nos entrega un disco lleno de ritmos irregulares, guitarras chirriantes y gritos vocalizados, un álbum tan distorsionado como pegajoso. «Emotional Mugger» engarza estilos musicales diferentes, incluso dentro de una misma canción; los requintos en la onda hard rock son incontenibles a lo largo del álbum, mientras la voz de Ty Segall retuerce sus graves y agudos indiscriminadamente hasta el estertor.
La secuencia del disco es toda una metamorfosis de sonidos, los cambios de un tema a otro están intercalados en ocasiones con audios incidentales de sintetizador, recordando los efectos sonoros de la ciencia ficción setentera. La coherencia musical que Ty Segall exhibió en su disco anterior «Manipulator» (2014), ha sido reemplazada en «Emotional Mugger» por una colección de ritmos disímiles que, por momentos, encuentran en lo absurdo su sentido.
Extraño, pero siempre fresco… Ty Segall nunca suena a sí mismo.
«EMOTIONAL MUGGER»
- Squealer
- Californian Hills
- Emotional Mugger / Leopard Priestess
- Breakfast Eggs
- Diversion
- Baby Big Man (I Want a Mommy)
- Mandy Cream
- Candy Sam
- Squealer Two
- W.U.O.T.W.S.
- The Magazine